Washington, 27 oct (PL) Astros de Houston buscará hoy su segunda victoria ante Dodgers de los Ángeles para ponerse al frente de la Serie Mundial 2017 de las Grandes Ligas de béisbol en Estados Unidos.
Tras perder 1-3 y ganar 7-6 en 11 innings en el primero y segundo partido, respectivamente, como visitadores, «los siderales» contarán este viernes con el apoyo de la mayor parte del público en su casa, el Minute Maid Park.
Como pitcher abridor de los locales actuará el derecho Lance McCullers Jr., quien en 13 entradas de labor en tres juegos de la postemporada carece de triunfos y derrotas.
Sin embargo, ostenta un juego salvado por su inmaculado desempeño de 12 outs en el decisivo séptimo partido de la Serie de Campeonato de la Liga Americana contra Yankees de Nueva York, víctima entonces de una blanqueada 0-4.
Por su parte, «los esquivadores» enviarán inicialmente al box al también diestro japonés Yu Darvish, dueño en los playoffs de dos éxitos sin fracasos, con 14 ponches propinados, y 1,59 de promedio de carreras limpias.
El disputado segundo choque, con empates de 1-1, 3-3 y 5-5 en el quinto, noveno y décimo capítulo, por ese orden, tuvo el desenlace decisivo gracias a un jonrón de George Springer tras hit y base robada de Cameron Maybin ante Brandon McCarthy.
A ese esfuerzo se sumó seguidamente la actuación del cuarto relevista de Astros, Chris Devenski, quien a un out de conseguir el éxito permitió bambinazo del jugador de cambio Charlie Culberson.
Finalmente, y con un Dodger Stadium ruidoso en extremo por el respaldo de la mayoría de los 54 mil 293 presentes al equipo local, Devenski ponchó al cubano Yasiel Puig, autor de un cuadrangular en su anterior vez al bate.
Ambos elencos se combinaron para anotar nueve de las 13 carreras del desafío a partir de la octava entrada en una verdadera lucha por conseguir el éxito.
Según datos oficiales, los ocho batazos de cuatro esquinas, divididos a partes iguales, establecieron un récord para un juego del llamado Clásico de Otoño, cuya primera edición aconteció en 1903.
Gigantes de San Francisco y Atléticos de Oakland tuvieron la anterior mejor cuota desde 1989, cuando dispararon siete vuelacercas en el tercer duelo de aquella Serie Mundial (o «de la Bahía»).
El actual abrazo 1-1 resulta la ocasión número 59 que eso ocurre en este tipo de lides, que solamente no se efectuaron en 1904 y nueve décadas después.